La ortopedia pediátrica es una rama de la medicina que se enfoca en el diagnóstico, tratamiento y prevención de las enfermedades musculoesqueléticas en niños y adolescentes. Esta especialidad aborda los problemas de desarrollo y deformidades de los huesos, músculos, articulaciones y ligamentos que pueden afectar el crecimiento y el bienestar de los niños. Hay que destacar que durante las fases de la niñez y la adolescencia y los músculos y huesos están en constante y pleno desarrollo.
¿En qué consiste la Ortopedia Pediátrica?
En la ortopedia pediátrica, el objetivo principal es lograr la corrección de las deformidades, la función normal de las extremidades y la prevención de complicaciones futuras. Esta especialidad se enfoca en el tratamiento de una amplia gama de condiciones, desde lesiones deportivas hasta trastornos congénitos.
Especialidades que podrás encontrar dentro de esta rama.
Esta especialidad dentro de la medicina abarca otras subespecialidades que tienen la ortopedia del adulto, pero los profesionales que se dedican a la ortopedia pediátrica tienen una formación específica en problemas ortopédicos congénitos o adquiridos en niños y adolescentes, ya que las lesiones cambian y el cuerpo responde de manera diferente según la edad del paciente.
Beneficios que nos aporta la Ortopedia para niños.
Los beneficios de la ortopedia pediátrica son significativos. En primer lugar, puede mejorar la calidad de vida de los niños y adolescentes que padecen enfermedades músculo esqueléticas. Los tratamientos y procedimientos ortopédicos pueden reducir el dolor y mejorar la movilidad, lo que les permite llevar una vida activa y saludable. Además, la ortopedia pediátrica puede prevenir complicaciones futuras, como la artritis y la discapacidad a largo plazo.
¿Qué tipo de enfermedades trata la Ortopedia Pediátrica?
La ortopedia pediátrica lucha contra una amplia variedad de enfermedades, como la escoliosis, el pie equinovaro, la displasia de cadera, el pie plano entre otras. También aborda lesiones comunes en niños, como fracturas, luxaciones y esguinces.
Las afecciones que trata el ortopedista infantil son muy extensas, desde esguinces, pasando por deformidades craneales, hasta pacientes con afectación neurológica como la parálisis cerebral:
- Malformaciones o alteraciones congénitas: hacen referencia a a esas anomalías en el cuerpo del bebe que se desarrollan durante el embarazo.
- Malformaciones o alteraciones adquiridas: alteraciones que se desarrollan durante el crecimiento del pequeño.
- Lesiones músculo-esqueléticas: lesiones que afectan a músculos, tendones, ligamentos…etc. En este grupo encontramos las fracturas, dislocaciones, esguinces, distensiones.
- Daño cerebral: pueden ser por un conjunto de variables dependiendo del área cerebral lesionada y la gravedad del daño de este.
- Enfermedades neuromusculares: engloba el conjunto de afecciones neurológicas, en su mayoría de origen genético, que comparten una característica en común: pérdida de fuerza muscular.
Si bien cada caso es único, hay algunas características generales de llevar a tus hijos al especialista ortopédico. Si tu hijo que queja de dolor en los huesos o las articulaciones, tiene dificultades para caminar o correr, o si nota alguna deformidad en las extremidades, es importante buscar atención medica. La evaluación temprana y el diagnóstico preciso son fundamentales para un tratamiento efectivo. Además, los niños en edad escolar deben ser examinados anualmente por un especialista en ortopedia para detectar posibles problemas de desarrollo.
Para detectar de forma precoz cualquier problema ortopédico recomendamos la visita al especialista desde el primer momento en el que el pequeño presente problemas relacionados con sus huesos, para ello, se realiza un examen físico completo, donde se valoran los rasgos de movilidad articular, identificar las zonas de dolor del joven, buscar algún tipo de derrame articular y comprobar la estabilidad de la articulación. Poniendo énfasis en los centros de crecimientos en los extremos de los huesos, que es donde crece el niño y es la zona más susceptible a lesionarse en las primeras 2 décadas de la vida.
Además, para conseguir la mejor solución para nuestros pacientes siempre llevamos a cabo un abordaje multidisciplinar para descartar cualquier problema.